La mayor parte de las lagunas costeras existentes presentan algún síntoma de impacto. Es frecuente observar en ellas problemas ambientales, sociales y hasta económicos derivados de su deterioro.
Algunas de las zonas de dunas más afectadas deben esta inestabilidad al impacto humano. En la foto, cordón dunar seccionado.
Un grupo interdisciplinar de investigadores europeos ha revelado que los miles de pequeños montículos que salpican las sabanas costeras de la Guayana Francesa son vestigios de un sistema agrícola precolombino construido hace unos 900 años.