Un equipo de la Universidad Autónoma de Madrid ha diseñado un novedoso método para la preparación de ciclopropanos, moléculas rígidas y triangulares de gran interés en la industria farmacéutica. Los resultados se han publicado en la edición especial de una revista científica que reúne trabajos de grupos internacionales liderados por mujeres.
Investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid y otros centros españoles han creado unos polímeros con capacidad para responder a ciertos estímulos, como la presencia de explosivos o gases tóxicos, por lo que podrían tener aplicación en la fabricación de sensores. La novedad es que utilizan cobre, en lugar de otros metales más caros, como la plata y el platino que se emplean hasta ahora.
Los metales pesados, fruto de la contaminación, pueden ser tóxicos para los animales hasta el punto de afectar a su reproducción y fisiología. Es el caso del carbonero común, cuyo color de plumaje varía de manera negativa y positiva en función de la exposición a ciertos materiales contaminantes. Mercurio, cobre y cromo pueden hacerlos menos atractivos ante las hembras.
Investigadores de la Universidad de Oviedo han diseñado un modelo geológico tridimensional de los depositos de Río Tinto, en Huelva. El trabajo, basado en los datos de 3.000 sondeos, abre el camino para encontrar nuevos puntos de extracción en este enorme yacimiento minero.
Graphenea, una firma de San Sebastián y una de las pocas que se dedican en el mundo a la fabricación de grafeno, está colaborando con el cento tecnológico IK4-TEKNIKER de Eibar (Gipuzkoa) en el desarrollo de un sistema que logre automatizar la producción de este material.
Investigadores valencianos, junto a colegas portugueses, acaban de presentar una nueva técnica para la datación arqueológica directa de objetos de cobre y bronce. El nuevo método, basado en la denominada voltamperometría de micropartículas, salva la carencia de la datación por radiocarbono, que no se puede aplicar a piezas metálicas.
Muestreo del sedimento desde el Lura / CSIC Galicia
Los datos obtenidos a partir del análisis de 400 muestras de sedimento sitúan a las rías de Ferrol y Vigo como las más alteradas y a las del Norte como las menos. El impacto de la construcción y fondeo de buques en las 12 rías estudiadas se hace evidente por la huella del cobre en el sedimento.
La empresa Cooper Andino, creada por el investigador de la Universidad de Chile Luis Améstica, ha desarrollado ropa con fibra de cobre para pacientes con Epidermolisis Bulosa –conocida como piel de cristal– una enfermedad incurable, poco común, pero que existe en todo el mundo.
Durante la Prehistoria, no se empezó a utilizar el bronce en lugar del cobre por ser éste un material más duro, sino por una simple cuestión estética: brilla más y es más parecido a la plata. Así lo afirma un grupo de arqueólogos de la Universidad de Granada en un artículo publicado en Menga.Revista de Prehistoria de Andalucía.