La retención del colágeno a nivel celular podría allanar el camino para el desarrollo de nuevos tratamientos que mejoren los efectos cosméticos de las cicatrices de la piel, alivien los síntomas de enfermedades autoinmunes como la esclerodermia, o incidan en la prevención del desarrollo de la fibrosis. Este tratamiento es efectivo, no tóxico y sus efectos son reversibles.
Ingenieros de la Universidad Carlos III de Madrid han elaborado una guía teórica para sistemas magnetoactivos, aquellos formados por una matriz polimérica y partículas magnéticas, con los que se podría estimular la cicatrización de lesiones epiteliales. Los autores trabajan dentro de un proyecto europeo para desarrollar músculos artificiales y otras formas de estimulación biomecánica.