Investigadores del Departamento de Química Orgánica de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) han creado un material sólido, con una estructura similar a un pastel de hojaldre. La “crema” entre las capas posee unas moléculas activas entre las que saltan los electrones por acción de la luz solar. Este es el fundamento de las células solares fotovoltaicas.