Un equipo de astrónomos ha obtenido la prueba más precisa de la teoría general de la relatividad de Einstein fuera de la Vía Láctea. El avance se ha logrado gracias al efecto de lente gravitacional de una galaxia cercana muy masiva, que distorsiona la luz de otra mucho más lejana creando un anillo de Einstein.
Cien años después de que Einstein presentara su teoría de la relatividad general, los científicos la han utilizado para medir por primera vez la masa de una estrella a partir de la desviación gravitatoria de la luz emitida por otra situada detrás. Así, se ha podido saber que la protagonista de la historia, una enana blanca, tiene aproximadamente el 68% de la masa del Sol.
Composición del anillo de Einstein de SDP.81 y de la galaxia observada a través de la lente gravitatoria.