La sequía que arrastra España en los últimos años ha llevado a declarar la situación de emergencia en regiones como Cataluña. En esta ocasión, la situación climática y la explotación excesiva de los acuíferos, ha desembocado en restricciones. La socióloga Regina Lafuente estudia la percepción de la población sobre la gestión del agua y su respuesta cuando escasea este recurso.
Los acuíferos están disminuyendo, pero la buena noticia es que se puede revertir. Los casos de éxito por políticas de gestión proactiva demuestran que es factible mejorar esta tendencia.
Un grupo internacional de científicos revela que la redistribución humana del agua existente bajo la superficie terrestre está provocando que la Tierra se incline más de lo normal. Concretamente, los investigadores sostienen que nuestro planeta se ha desplazado casi 80 centímetros hacia el este en el periodo comprendido entre 1993 y 2010.
Cerca de un 20 % de las masas de agua que se encuentran bajo la superficie terrestre podrían desaparecer si las reservas continúan disminuyendo. Esta es la conclusión de un estudio, liderado por la Universidad de California (EE UU), que ha evaluado datos de casi 39 millones de pozos a escala global, incluidos algunos en España.
El uso de aguas subterráneas contaminadas con arsénico para cocinar y beber podría suponer un riesgo para la salud de casi 20 millones de personas en China. Así lo demuestra un nuevo modelo estadístico de riesgos llevado a cabo por científicos de la Universidad de Santiago de Compostela y el instituto Eawag (Suiza), en colaboración con investigadores de la Universidad Médica de China en Shenyang.
Un equipo internacional, en el que participa el profesor de la Facultad de Física de la Universidad de Santiago de Compostela, Gonzalo Míguez Macho, acaba de publicar un artículo en la revista Science que compila observaciones alrededor de todo el planeta respecto de la profundidad de la capa freática a partir de informaciones de archivos gubernamentales y de la literatura científica existente.