Un estudio de la Universidad Carlos III de Madrid ha realizado una descripción matemática de cómo los tumores inducen el crecimiento de vasos sanguíneos. Los autores sostienen que las puntas de los vasos se propagan como un solitón, es decir, como una onda solitaria similar a un tsunami.
Imagina un meteorito de varios kilómetros cayendo en un océano. Se origina un tsunami gigantesco, con olas de hasta 120 metros de altura que penetran más de 600 km en el interior de un continente. Este escenario apocalíptico pudo ocurrir en Marte hace millones de años, según los depósitos y las huellas geológicas que se han encontrado ahora en las llanuras del planeta rojo.
Infografía de la situación de Japón cinco años después del tsunami. / Efe
¿Qué hay detrás del 'milagro' de la separación de las aguas? ¿Cuál fue la ruta del éxodo? Estas son algunas de las cuestiones que se abordan en los recientes trabajos realizados por dos investigadores de la Universidad de Sevilla. Según los científicos, las catástrofes naturales asociadas a la explosión de Santorini, incluida la secuencia de tsunamis que se desencadenó, pudieron tal vez haber inspirado el relato bíblico del éxodo, pero no se ajustan a una interpretación literal o maximalista del mismo.
Parte de la configuración actual del Parque Natural de Doñana y de poblaciones como la de Sanlúcar de Barrameda en Cádiz se originó a consecuencia de los tsunamis ocurridos hace unos 3.000 y 4.000 años. Así lo revela un estudio de la Universidad de Huelva que ha realizado diversos sondeos y análisis de los sedimentos y los fósiles en el entorno de Doñana para llegar a estas conclusiones.
El gran tsunami que asoló Cádiz tras el terremoto de Lisboa de 1755 es el más reciente, pero no el único. Nuevos depósitos sedimentarios hallados en la playa gaditana de Barbate demuestran que un tsunami de gran magnitud se produjo hace 4.000 años, y se suma a otros siete ocurridos durante los últimos 7.000 años, reduciendo así a mil años la recurrencia de estos eventos extremos en la costa andaluza. Según el estudio, los depósitos se asemejan a los restos del tsunami japonés del 11 de marzo de 2011.
Investigadores de la Universidad de Zaragoza y de la Universidad Complutense de Madrid han descubierto evidencias de que un gran tsunami afectó a la provincia de Teruel hace 128 millones de años. Este maremoto fosilizó cientos de huellas de dinosaurios y formó el megayacimiento de icnitas de mayor extensión conocido en Europa.
El deslizamiento de la placa tectónica de Norteamérica sobre la del Pacífico en una falla inusualmente fina provocó el seísmo que arrasó el noroeste de Japón en marzo de 2011, según se publica en Science. Esta región podría sufrir fenómenos similares debido a una resbaladiza arcilla que actúa como un lubricante.