Hace unos días fallecía uno de los participantes de un ensayo clínico en Fase I realizado en Rennes (Francia) y otros de los voluntarios tenían que ser hospitalizados. Aunque este suceso va a desencadenar una nueva revisión de los requerimientos de seguridad y de los protocolos de realización de los ensayos en humanos, la Agencia Europea del Medicamento ha subrayado que se trata del primer caso grave de este tipo detectado desde 2007. Se han realizado desde entonces más de 12.500 ensayos clínicos de Fase I.