A través de los olores desprendidos del aliento y de muestras de heces, los perros son capaces de detectar, con un alto grado de precisión, el cáncer de intestino. Los resultados, publicados esta semana en la edición on line de la revista Gut, muestran como los animales perciben incluso las fases más tempranas de la enfermedad por el olfato.
De momento, emplear perros para la detección del cáncer es una herramienta más costosa que práctica.
España es uno de los países europeos donde mayor número de animales salvajes mueren en el medio natural por el uso ilegal de venenos. Aves y mamíferos silvestres sufren las consecuencias de los cebos de la caza o de la ganadería, pero no son los únicos. Vacas, cabras, ovejas, perros, gatos, y caballos, entre otros, se suman a la lista de animales que sufren, en silencio, la lacra del veneno con accidentes que, en muchos casos, podrían evitarse.
Los perros son agresivos si reciben una mala educación. Foto: Hexodus