En la imagen, el proceso de lucha fratricida entre los neumococos.
Investigadores del centro de salud pública Johns Hopkins Bloomberg (Baltimore, EE UU) han analizado el uso mundial de la vacuna contra la bacteria Haemophilus influenzae tipo B (Hib), responsable de unos tres millones de enfermedades graves y de casi 400.000 muertes anuales, para determinar qué factores intervienen en su adopción por parte de una nación.
Investigadores del CIBER de Enfermedades Respiratorias han conseguido medir la carga bacteriana, y predecir las complicaciones y mortalidad en la neumonía neumocócica, la principal causa de muerte por infección bacteriana en el mundo occidental. El estudio ha sido publicado en la revista Chest.
Una investigación internacional liderada por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha hallado nuevos datos sobre la estructura del neumococo que permitirán entender mejor los mecanismos de infección de esta bacteria, uno de los principales patógenos humanos, responsable de enfermedades como la otitis, la sinusitis, la meningitis o la neumonía, causante de tres millones y medio de muertes al año en todo el mundo.
El Laboratorio de Biotecnología de Proteínas del Instituto de Biología Molecular y Celular de la Universidad Miguel Hernández (UMH) ha publicado recientemente un artículo en la prestigiosa revista química Angewandte Chemie en el que se describe la síntesis de un nuevo tipo de moléculas con aplicaciones antibacterianas. En concreto, el trabajo recoge la investigación de la UMH de posibles nuevos antibióticos contra la neumonía y la meningitis.
¿Quién no comparte la imagen de los anticuerpos como una especie de “fuerzas armadas” contra las infecciones? Sin embargo, esta idea no hace justicia a todas las posibilidades de los anticuerpos, para los que la investigación ha desarrollado otra función fuera del organismo: la de detectores de enfermedades. Pero quizá lo más inesperado es que, para generarlos, los científicos utilizan híbridos creados a partir de células cancerosas y linfocitos B. Es parte del trabajo de investigadores de la Universidad de Oviedo, que acaban de comercializar en Europa un anticuerpo relacionado con el diagnóstico de un tipo de neumonía.
En la imagen, Marcos García Ocaña, en el laboratorio de la Unidad de Biotecnología Preparativa de la Universidad de Oviedo. Fotografía: FICYT.
Los pacientes que se encuentran en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCIs) a menudo reciben antibióticos como medida de precaución contra la neumonía asociada a la ventilación mecánica. El investigador holandés Stefan Visscher ha desarrollado un modelo para diagnosticar rápidamente la neumonía en un paciente. De esta manera se puede evitar el tratamiento innecesario con antibióticos.