Investigadores de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid han desarrollado un prototipo de mascarilla que lleva un sensor incorporado y que es capaz de distinguir diferentes estados de respiración. La información que recoge se transmite de forma remota y en tiempo real.
Una investigación liderada por físicos de la Universidad de Salamanca ha demostrado que la luz puede forzar una torsión sobre sí misma en ausencia de fuerzas externas. Esta propiedad, descrita por primera vez, podría ser usada en el futuro para manipular nanoestructuras y átomos en escalas de tiempo ultrarrápidas.
Investigadores de la Universidad de Alicante están desarrollando películas plásticas adhesivas con propiedades antimicrobianas a partir de aceites esenciales. La combinación del material y la estructura de la superficie es capaz de eliminar varios tipos de gérmenes e inhibir el crecimiento bacteriano con una eficacia del 99%. El material podrá aplicarse tanto en paredes y suelos como mesas, camas o pomos de puerta.
Investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid han propuesto una forma alternativa de utilizar las llamadas ondas de espín para diseñar nuevos dispositivos espintrónicos. Estos cumplirían las mismas funciones que los actuales dispositivos electrónicos, pero con ahorros de energía y con una durabilidad y rendimiento mucho mayores, así como con frecuencias de operación mucho más elevadas.
Un equipo de la Universidad de Berkeley (EE UU) y el Centro de Física de Materiales (CSIC-UPV/EHU) en España han conseguido crear por primera vez y con precisión atómica nanoestructuras que combinan tiras de grafeno de diferentes anchuras. La formación de heteroestructuras con distintos materiales se aplica en ingeniería electrónica.
Investigadores del CSIC y la Universidad Complutense de Madrid han desarrollado un material con nanocolumnas de titanio para implantes óseos que tienen acción antibacteriana. Este compuesto, inspirado en la naturaleza, abre nuevas vías para reducir riesgos de infección en las intervenciones quirúrgicas.
Investigadores del Instituto de Ciencias Fotónicas (ICFO), en colaboración con la firma estadounidense Corning Incorporated, han desarrollado una superficie de vidrio erosionada que reduce tanto el resplandor como la reflexión en pantallas de dispositivos móviles. Los autores también han demostrado que la superficie texturizada repele el agua, imitando los efectos de una hoja de loto.
Antonio Luque, presidente del Instituto de Energía Solar de la Universidad Politécnica de Madrid, encabeza un equipo de investigación que ha conseguido financiación del Gobierno ruso para crear un laboratorio de células solares nanoestructuradas, más eficientes que las convencionales de silicio. El proyecto fue seleccionado en una edición de Megagrant, una iniciativa puesta en marcha por Rusia en 2010 para atraer a investigadores de relevancia internacional, a la que concurrieron otras 720 propuestas.
Una investigadora de la Universidad Pública de Navarra ha desarrollado un tipo de nanoestructuras que facilitan el proceso de descontaminación del agua. Estas diminutas estructuras están recubiertas por óxido de titanio con nitrógeno, lo que permite que sea la luz solar la que inicie el proceso de reacción química y destrucción de contaminantes.
El horno de grandes dimensiones ha sido diseñado para obtener materiales densos a partir de polvo nanoestructurado. La instalación permitirá fabricar espejos para satélites, ventanas transparentes al infrarrojo para aviones y placas para blindajes.