Un estudio con participación española recoge el material genético de las mitocondrias de un úrsido de hace 400.000 años encontrado en el yacimiento de la Sima de los Huesos en Atapuerca (Burgos). El siguiente objetivo de los investigadores es encontrar el ADN humano más antiguo.
Los humanos primitivos ataban puntas de piedra a mangos de madera para confeccionar lanzas y cuchillos 200.000 años antes de lo que se pensaba. Según un estudio publicado en la revista Science, el ancestro común de neandertales y Homo sapiens –el Homo heidelbergensis– ya empleaba esta técnica.