En 1920 el hongo Sclerogaster luteocarneus fue descubierto en un municipio brasileño, y unos años más tarde, en 1936, apareció en la isla de Guadalupe, en las Antillas francesas. Pero durante los casi 80 años siguientes la especie no había vuelto a observarse, hasta el punto que los científicos la daban por extinguida. Ahora, un equipo internacional de científicos, con colaboración española, la ha hallado de nuevo en Brasil.
El uso o no de la energía nuclear no es una decisión que competa exclusivamente a los expertos. La ciencia, en general, y las ciencias medioambientales, en particular, no son ajenas a la sociedad, sino que se contextualizan en ella. María Laura Lázaro, profesora de la Universidad de Uruguay, ha presentado en la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) una tesis doctoral que reflexiona sobre la relación entre la ciencia y la sociedad, concretamente en lo que se refiere a la participación pública y al estímulo de una cultura científica.