La investigación y el progreso han permitido un aumento de la producción en las aplicaciones diarias mediante nanoparticulas y nanomateriales. Sin embargo, todavía existen cuestiones sobre los posibles efectos en la salud que es preciso resolver, tal como ha asegurado en la Universidad de Zaragoza, el investigador italiano Enrico Sabbioni, de la Fundación Universitaria d’Annunzio, de Chieti (Italia). Sabbioni ha destacado el alto nivel de conciencia de los científicos por verificar todos los procesos, que se traduce en la existencia de numerosos proyectos de investigación en marcha en todo el mundo para valorar los posibles riesgos del uso de nanomateriales.
Personal científico del Instituto de Ciencia de Materiales de Aragón (ICMA, un centro mixto de la Universidad de Zaragoza y del CSIC) y de los Servicios de Apoyo a la Investigación del campus aragonés lideran un proyecto mundial de construcción de pequeñas plantas para licuar helio, que se adapten al consumo de refrigeración de hospitales, laboratorios e industrias.
Las pilas de combustible alimentadas por hidrógeno son hoy día los sistemas de producción de energía más eficientes y más limpios, aunque todavía precisan de ciertas mejoras, tal como ha advertido hoy en la Universidad de Zaragoza, John Kilner, uno de los máximo expertos en esta tecnología. El investigador británico, científico del Imperial College London y una de la figuras punteras a nivel mundial en pilas de combustible y producción de hidrógeno, considera que es imprescindible reducir las elevadas temperaturas con que funcionan, cercanas a los 900ºC, para que los materiales que se utilizan en su composición sean más económicos.