La tendencia a la vespertinidad es algo común entre los adolescentes, quienes se levantan y acuestan cada vez más tarde. El reloj biológico dicta tales cambios. Según un estudio realizado por investigadores de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) el desajuste entre la vespertinidad del adolescente y los horarios escolares matutinos, podría ser un aspecto más a considerar en la predicción del rendimiento escolar.