Con su guitarra siempre al hombro, una sonrisa en el rostro y un inconfundible acento gaditano, Francisco Cornejo es el científico elegido para representar a España en el 20 aniversario de las acciones Marie Skłodowska-Curie, el mejor programa de becas de investigación de la Unión Europea. Durante los próximos tres años, Cornejo desarrollará, gracias a una beca, un proyecto para entender la simbiosis marina desde un punto de vista evolutivo.
Es doctor en Física, profesor, divulgador y, en la actualidad, Jefe del Servicio de Geomagnetismo del Real Observatorio de la Armada. En total, ha pasado dos años de su vida en el Ártico y la Antártida, a bordo del buque de investigación oceanográfica Hespérides. Manuel Catalán Morollón (San Fernando, Cádiz, 1962) nos relata su experiencia como científico y militar en las regiones con el clima más extremo del planeta.
La Base Antártica Juan Carlos I, que pertenece al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), cierra mañana sus puertas hasta el próximo otoño. Concluye así la Campaña Antártica 2014‐2015, en la que han participado en total 80 investigadores de 12 países. El CSIC lidera dos proyectos y participa en otros dos de los 15 que se han realizado en esta edición, que ha durado unos 100 días.
Un estudio liderado por investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas demuestra que la radiación ultravioleta aumenta la capacidad de captura de CO2 del océano del Ártico al suprimir la actividad bacteriana. Según los resultados, que aparecen publicados en la revista Geophysical Research Letters, el 77% de las comunidades de plancton sufren, de media, un incremento del 38,5% en su producción neta cuando están expuestas a la radiación ultravioleta natural.
La XXVIII Campaña Antártica Española ha comenzado hoy con la salida del Buque de Investigación Oceanográfica Hespérides rumbo a la Antártida. De los 15 proyectos que se realizarán durante esta campaña, dos están liderados por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y otros dos cuentan con participación de investigadores de varios institutos de este organismo.
Tres años después de que el buque Hespérides regresara a España culminando la vuelta al mundo de la expedición Malaspina, los científicos tienen una idea cada vez más clara sobre cómo funciona el océano global y cuál es su estado de salud. En concreto, la entrada de contaminantes procedentes de la atmósfera no se limita a las zonas costeras, sino que se produce también en las zonas más remotas del planeta y ya ha empezado a afectar al ecosistema oceánico.
Científicos de la expedición oceanográfica Malaspina estudiarán si los materiales radiactivos vertidos en el accidente de la central nuclear japonesa de Fukushima han alcanzado el Pacífico central. El buque Hespérides parte mañana de Sidney (Australia) para iniciar la siguiente etapa en la que tomarán muestras de aire, agua y plancton, y buscarán posibles huellas del vertido radiactivo.
Al Hespérides se le unirá, en enero del próximo año, el Sarmiento de Gamboa. Entre ambos acumularán cerca de 9 meses de navegación y 33.000 millas náuticas (una milla náutica equivale a poco más de 1,8 kilómetros).