Durante la última semana, las llamas se han extendido sin control por el Parque Natural de Tamadaba, al noroeste de la isla de Gran Canaria. El ligero descenso de las temperaturas este miércoles ha permitido que los equipos de extinción puedan empezar a estabilizar el fuego y asegurar ciertas zonas. La mitad de las 9.000 personas evacuadas ha podido volver hoy a sus casas.
José Antonio Peñas
Ejemplar de la nueva especie de coleóptero Oromia thoracica. / Heriberto López
Gracias a las investigaciones realizadas desde 2003 en el subsuelo de Gran Canaria, dos científicos españoles han descubierto una nueva especie de escarabajo, al que han llamado Oromia thoracica. Este gorgojo ciego comparte la tonalidad parda de la fauna del subsuelo y destaca por tener un cuerpo aplanado y un tórax que casi cubre su cabeza, lo que facilita su adaptación a la vida bajo tierra.
Imagen captada por el satélite Terra de la NASA donde se aprecia el vertido / NASA
Un modelo matemático diseñado por investigadores de la Universidad Complutense de Madrid estima que la mancha de fuel vertida por el pesquero Oleg Naydenov en el archipiélago canario avanzará hacia el suroeste de Gran Canaria y el sureste de Tenerife. El modelo, que ha demostrado su fiabilidad con el accidente del Prestige, descarta que el vertido vaya a llegar a Lanzarote y Fuerteventura.
Pocas especies pueden adaptarse a la escarpada orografía volcánica del archipiélago canario, pero un árbol cuyo origen se remonta al Jurásico está capacitado para hacerlo: el pino canario (Pinus canariensis). Su resistencia al fuego y su gran versatilidad lo convierten en un ejemplar todoterreno, piedra angular, además, de la arquitectura de las islas.
Investigadores españoles y franceses han determinado la edad, la distribución, el volumen y la geoquímica de los volcanes de Gran Canaria durante el Holoceno, desde hace 11.000 años, para establecer un mapa de peligrosidad volcánica de la isla. El estudio demuestra que el área de mayor actividad volcánica es una de las zonas más pobladas del noreste de la isla, que en el periodo analizado ha sufrido 24 erupciones.
Tubo formado en la colada de lava de la erupción más antigua del Holoceno en Gran Canaria, El Draguillo, en el este de la isla, en la localidad de Teide.