En la imagen pueden observarse los diferentes volúmenes (verde = grande, amarillo = pequeño) de las regiones del cerebro en 42 adultos que muestran la coincidencia entre las formas que los cerebros de las mujeres y los cerebros de los hombres. / Zohar Berman y Daphna Joel
Una nueva investigación confirma una clara infrarrepresentación de las mujeres en el ámbito de la investigación en epidemiología y salud pública en España tras analizar las posiciones de liderazgo en los centros de excelencia y en las sociedades científicas y los proyectos solicitados y financiados entre 2009 y 2014.
Un trabajo examina cómo los niveles de testosterona cambian con los comportamientos de competición. Se solicitó a 41 actores y actrices que representaran un monólogo dos veces –una en estilo masculino y otra en estilo femenino–. En la pieza teatral se realizaba una ostentación de poder. Al interpretarla, los niveles de testosterona se elevaban en las mujeres, independientemente del sexo al que encarnaran durante la representación.
Un estudio en el que han participado más de 4.000 adolescentes revela que el 24% presenta riesgo de ejercer abuso de género, daño que alguno ya ha ejercido en forma de control y otros abusos. Estos chicos, con niveles de autoestima más bajos que el resto, se identifican con un modelo sexista de dominio y sumisión característico de la violencia de género.
Un estudio de la Universidad de Alicante indica que la curva del esfuerzo de las campañas de igualdad de género es irregular y desvela intenciones políticas de las inversiones que, a priori, se realizaron con supuesta pretensión informativa o de sensibilización social. Según los investigadores, sería imprescindible utilizar datos sobre el cambio de actitudes y de conductas para medir los resultados de las campañas institucionales.
Desde 1980 hasta 2011, el promedio de parlamentarias en el conjunto de las cámaras autonómicas españolas ha pasado del 6% al 42,1%, un incremento más rápido que el experimentado en Canadá y Estados Unidos. Así lo revela un estudio en el que participa la Universidad Complutense de Madrid, donde se pone de manifiesto que las mujeres se encuentran infrarrepresentadas en los puestos más importantes de estos órganos.
A finales del siglo XIX un grupo de 13 mujeres, conocidas como ‘las calculadoras’, se dedicaban a contar y clasificar estrellas en el Observatorio Astronómico de Harvard. Realizaban un trabajo tedioso y mecánico que, sin embargo, ayudó a sentar las bases de la astrofísica moderna. Durante mucho tiempo, estas científicas estuvieron olvidadas. Eulalia Pérez Sedeño, investigadora del Centro de Ciencias Humanas y Sociales del CSIC, pone este y otros ejemplos para explicar que la historia de la ciencia a menudo se ha escrito sin tener en cuenta la contribución de las mujeres.
Restauración histórica de cómo se imaginaron al 'Brontosaurus' a finales de 1800: acuático y con un gran y robusto cráneo. / Artista desconocido (sin derechos de autor)
Si en astronomía se destronó a Plutón como planeta, en paleontología también existe otro ‘príncipe’ destronado. Se trata del emblemático brontosaurio, que desde 1903 se clasificaba dentro del grupo de los Apatosaurus, y al que un reciente estudio ha devuelto su categoría de género único.
Una investigación de la Universidad de Islas Baleares ha analizado el fenómeno del plagio académico entre el alumnado de Educación Secundaria Obligatoria y Bachillerato. El estudio, publicado en la revista Comunicar, asegura que esta práctica está ampliamente extendida en las aulas de los ciclos educativos medios, sobre todo entre los varones. Además, aquellos que dejan las tareas para el último momento son los que tienen mayor propensión a copiar.