Investigadores del Departamento de Ciencias Agrarias y del Medio Natural de la Universitat Jaume I (UJI) han estudiado la capacidad de distintos genotipos de cítricos para capear los estragos producidos por los altos niveles de salinidad en el agua de riego. El objetivo es encontrar los más resistentes y descubrir los mecanismos que emplean para lograrlo.