No es fácil encontrar en el mundo de la ciencia una persona de la talla de Emiliano Aguirre (Ferrol, 1925 - Burgos, 2021). Sus inicios en el ámbito de la ciencia española, allá por la década de 1960, no fueron sencillos. Pero su capacidad de trabajo, su inteligencia y su tesón le llevaron a conquistar metas inaccesibles para la mayoría.
El paleontólogo, considerado el padre de las excavaciones en el yacimiento de Atapuerca, falleció ayer en Burgos a los 96 años, según han informado fuentes de la Fundación Atapuerca.