Entre 1955 y 1998, diferentes países de Europa occidental registraron un incremento de los días de calor extremo. Según un estudio de la Universidad Complutense (UCM), España es uno de los países que más sufren este periodo. Las razones de este aumento térmico: las construcciones en zonas urbanas, el cambio climático y las alteraciones en la circulación de la atmósfera.
En España han desaparecido los líderes regionales formados en las Cortes Generales, con excepción de algunos relevantes ministros.
En los últimos 12 meses la cifra total de desempleados ha aumentado en 297.400 personas.
La mayoría de las personas que aseguraron haber realizado alguna vez trabajos de voluntario -pero no en los últimos doce meses- afirmaron haber abandonado la actividad por un cambio en sus circunstancias personales o por falta de tiempo.
Aunque España sea un país cálido, existe una carencia generalizada de vitamina D en toda la población, que se puede relacionar con un aumento del riesgo de sufrir cáncer de colon, mama o próstata. Los científicos exigen mayor atención de los profesionales sanitarios, sobre todo en atención primaria.