En España, el porcentaje de malformaciones congénitas ha caído a menos de la mitad desde 1980, según los nuevos datos inéditos de un estudio pionero comenzado en 1976. El diagnóstico prenatal, los cuidados durante la gestación y la interrupción voluntaria del embarazo son algunas de las razones del descenso. Sin embargo, a pesar de los avances, los expertos descartan que se puedan eliminar por completo.
Un ensayo clínico quiere corroborar en niños y niñas los buenos resultados de un compuesto del té verde en la función cognitiva de adultos jóvenes con síndrome de Down. Los ensayos clínicos con niños son muy poco comunes, y aún más cuando se trata de enfermedades con baja prevalencia. Se espera que al iniciar el tratamiento en edades más tempranas, los resultados sean mejores y más estables en el tiempo.
Un nuevo estudio realizado en ratones podría explicar por qué las personas con síndrome de Down presentan un menor riesgo de padecer determinados tipos de cáncer. El trabajo, realizado por un equipo internacional de investigadores, muestra que son algunos genes nuevos, presentes en la copia extra del cromosoma humano 21 de los pacientes con dicho síndrome, los responsables de este efecto.
Las investigaciones realizadas en los últimos años sobre el síndrome de Down han estado centradas en el gen DYRK1A. La sobrexpresión de este gen afecta a la transmisión de las neuronas. Este fallo en la transmisión podría estar en el origen de la deficiencia en la memoria visuo-espacial de las personas con síndrome de Down. Así lo ha explicado Garikoitz Azkona en su tesis doctoral Bases moleculares de neuropatología del síndrome de Down: Implicación de DYRK1A.