El cumplimiento de los acuerdos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero conlleva desafíos pero también recompensas. Una investigación del Centro Vasco para el Cambio Climático ha evaluado el impacto de los nuevos objetivos de la COP26 en Glasgow y, si se llevan a efecto, se podría restringir el calentamiento global a 1,7-1,8 °C.
Investigadores de la Universidad Politécnica de Valencia han evaluado las áreas más vulnerables de los ríos y determinan que el aumento de temperaturas hará que las especies de aguas frías, como la trucha común, reduzcan significativamente su hábitat potencial.
Un informe de síntesis en el que han participado más de 90 expertos advierte que la quema de combustibles fósiles ha provocado un aumento de 1,1 ºC por encima de los niveles preindustriales. Para limitar el calentamiento a 1,5 °C, es preciso lograr reducciones contundentes y rápidas de las emisiones de gases de efecto invernadero en todos los sectores.
Gracias a un modelo informático, un equipo de investigadores liderado por la Universidad Nacional de Pusan (Corea del Sur) ha constatado que las capas de hielo de la Antártida y Groenlandia se desintegrarán y fundirán a un ritmo acelerado si no se estabiliza el incremento de temperatura global por debajo de esa cifra.
Las proyecciones climáticas elaboradas por los investigadores de ExxonMobil entre 1977 y 2003 predecían con precisión el posterior calentamiento del planeta, según revela un estudio de la Universidad de Harvard. Sin embargo, las declaraciones públicas del gigante petrolero estadounidense contradecían sus propios datos científicos.
La Fundación BBVA ha galardonado a los paleoclimatólogos James Zachos y Ellen Thomas por identificar un ‘efecto invernadero’ de hace 56 millones de años. El hallazgo resulta de gran interés para predecir la evolución del cambio climático desencadenado ahora por el ser humano.
Los informes del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) no acaban de movilizar a la ciudadanía, que tampoco distingue entre los efectos del calentamiento global de los que han ocurrido siempre. Además, la guerra de Ucrania ha cambiado las prioridades energéticas. Hablamos de estos asuntos con uno de los autores del último informe.
Entre el 21 de marzo y el 1 de abril se reúne el Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) para aprobar el estudio sobre medidas que frenen la crisis climática, en el que llevan trabajando tres años más de 200 autores y autoras. El texto, que corresponde a la tercera entrega del VI informe del grupo de expertos, se publicará el 4 de abril.
El análisis de los registros históricos de temperatura en la región del Gran Caribe, que incluye el Golfo de México, ha permitido detectar una tendencia ascendente de la temperatura del mar desde 1915 que está afectando al ecosistema de corales de la zona. De continuar este ritmo, los arrecifes podrían calentarse 1,5 °C de aquí a 2100, lo que compromete su supervivencia.
Investigadores de la Universidad de Cambridge han observado tasas de fusión muy altas en el fondo de la capa de hielo de Groenlandia, causadas por las enormes cantidades de agua deshelada que cae desde la superficie. Al hacerlo, la energía se convierte en calor, en un proceso equivalente al de las diez mayores centrales hidroeléctricas del mundo juntas.