La observación de la galaxia A2744_YD4, la más lejana y más joven detectada por el Observatorio Europeo Austral, ha permitido el descubrimiento de una gran cantidad de polvo estelar antiguo procedente de las muertes de las primeras supernovas, que se produjo cuando el universo solo tenía el 4% de su edad actual. Este hallazgo ofrece un paso más en el estudio sobre cómo se formaron las primeras estrellas y galaxias del universo.