Un compuesto obtenido de la hoja de olivo es capaz de activar rutas moleculares importantes para la migración de las células del borde de una herida y acelerar su cierre. Así concluye un estudio reciente, publicado en Plos One y llevado a cabo por expertos de instituciones murcianas.
El Instituto de Biología y Genética Molecular (IBGM) de Valladolid trabaja desde hace cerca de ocho años en el potencial del ácido oleanólico, un ácido triterpénico presente en la cutícula y las hojas del olivo, como principio activo frente a los signos y síntomas de enfermedades con un importante componente inflamatorio, como la esclerosis múltiple.