El estudio muestra que utilizaban un composite de cera de abeja, resina de pino y un tinte vegetal pegado a la superficie de una concha para crear una apariencia ambarina. Los artefactos hallados en 15 yacimientos de España y Portugal revelan la conducta intencional y premeditada destinada a la manufactura de falsificaciones.
Esta resina tan apreciada en joyería ya se importaba hace más de 5.000 años, un milenio antes de lo que se pensaba. Lo sugiere un trabajo científico llevado adelante por investigadoras de las universidades de Granada y Cambridge.
Un estudio internacional, en el que participa la Estación Biológica de Doñana, ha descrito una especie de mosca extinta que forma parte de una familia completamente nueva, Christelenkidae.
Un estudio liderado por el CSIC analiza fragmentos de ámbar del Cretácico inferior que revelan la relación simbiótica entre ambas especies.
Hace siglo y medio, en los bosques del norte de Europa, se encontró una resina fósil con una flor encerrada en su interior: Stewartia kowalewskii, de 2,8 cm de diámetro y con unos 35 millones de años de antigüedad. Ahora, dos investigadoras han analizado su polen y consideran que se trata de otra especie: Symplocos kowalewskii.
El espécimen, llamado Calliarcys antiquus, es una especie de insecto que no había sido descrita hasta hasta ahora y fue localizado en Alemania. En su identificación han colaborado científicos de cinco países, entre ellos, Javier Alba-Tercedor, catedrático de Zoología de la Universidad de Granada, que ha realizado un trabajo clave de microtomografía para obtener imágenes nítidas.
Al igual que el ámbar, los excrementos de dinosaurio pueden esconder tesoros paleontológicos ocultos. Al escanear unos restos de estos coprolitos, un equipo de científicos ha descubierto en su interior ejemplares muy bien conservados de una nueva especie de escarabajo de unos 230 millones de años de antigüedad.
Un equipo de investigación internacional ha descubierto en ámbar un pequeño reptil del Cretácico del género Oculudentavis. Al compararlo con el que se creía el dinosaurio aviano más pequeño del mundo descrito hasta ahora, similar a un colibrí actual, los paleontólogos demuestran que ambas especies pertenecían al mismo género y eran en realidad lagartos.
Aunque en la actualidad los camaleones poseen la lengua más rápida y elástica del reino animal, no fueron los primeros en desarrollarla. Un grupo raro de anfibios que vivió hace más de 100 millones de años ya capturaba a sus presas con una proyección explosiva de su lengua, como confirman los restos de tejido blando de una nueva especie conservada en ámbar.
Científicos del Instituto Geológico y Minero de España han hallado en el ámbar del yacimiento de El Soplao (Cantabria) savia fósil. Se trata de pequeñas gotas que forman unas texturas muy peculiares, conocidas como dobles emulsiones.