Una libélula, una tortuga de las Islas Galápagos, un caballito de mar y un mono que vivió en Cataluña hace más de 11 millones de años, son algunos de los animales que figuran en el Top 10 de nuevas especies descubiertas en 2015. Un tercio de estas especies dispone de áreas de distribución muy reducidas por lo que su supervivencia está comprometida. El listado de este año pone así de manifiesto que uno de los problemas a los que se enfrenta la biodiversidad es la falta de espacio.