Con imágenes de resonancia magnética funcional, investigadores de Finlandia han comprobado cómo la actividad cerebral varía según el tipo de relación de afecto. Mientras que la vinculación paternal y romántica impulsa intensamente el sistema de recompensa, el sentimiento por mascotas y por la naturaleza despiertan otras áreas del cerebro.
Un estudio del Institut de Ciències del Mar y el Centro Superior de Investigaciones Científicas ha revelado las pautas alimenticias de estos moluscos y su posible rol en la regulación de animales alóctonos en el Mediterráneo. Conocer su forma de alimentarse es clave para entender su posición en la cadena trófica y la estructura de sus poblaciones explotadas.