Investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid han desarrollado un método que permite establecer el contenido de diversos elementos esenciales, como los minerales, en bebidas y suplementos alimenticios disponibles en el mercado. Los análisis se realizan de forma rápida y casi simultánea.
Un estudio internacional con participación española valora la biodiversidad de los bosques en una cantidad entre 166.000 y 490.000 millones de dólares por año, cifra que multiplica por cinco el precio de conservarlos. Los científicos analizaron 777.126 parcelas de muestreo con 30 millones de árboles de 8.737 especies en 44 países de todo el mundo.
Con 18 años, Nathan Copeland perdió la sensibilidad en sus manos tras lesionarse la médula en un accidente. Una década después ha logrado recuperar el sentido del tacto gracias a un implante cerebral y un brazo robótico. Investigadores estadounidenses han logrado por primera vez este avance mediante una nueva tecnología de microestimulación de la corteza sensorial del cerebro.
Un estudio internacional revela que el nivel de capacidad aeróbica de los niños y jóvenes, calculable con una prueba física denominada ‘test de ida y vuelta’, es una excelente herramienta para identificar quiénes de ellos poseen un mayor riesgo de sufrir una enfermedad cardiovascular o un infarto de miocardio. El trabajo analiza datos de más de 9.000 niños y jóvenes de entre 8 y 19 años, procedentes de 14 países.
Hace unos 66 millones de años un dinosaurio se apoyó en el suelo y dejó marcadas las escamas de su piel en los lodos de la ribera de un río, ahora convertidos en roca sedimentaria en el yacimiento de Vallcebre en Barcelona. El hallazgo de esta impresión fósil, que data del Cretácico Superior, es único en Europa.
Grandes bloques de tierra con unas dimensiones cercanas a los 300 kilómetros de largo y 150 kilómetros de ancho han rotado siguiendo el sentido de las agujas del reloj (en el caso de la cordillera Bética) y en el sentido contrario (en el caso de la cordillera del Rif, en el Norte de Marruecos). Así lo demuestra un equipo que ha reconstruido el Arco de Gibraltar en un momento clave de la historia tectónica de la colisión entre África e Iberia, poco antes del cierre de la conexión entre el Atlántico y el Mediterráneo.
La resolución de los sistemas ópticos –típicos en telescopios o cámaras fotográficas– está limitada por el llamado límite de Rayleigh. Un equipo internacional de científicos dirigidos por la Universidad Complutense de Madrid ha conseguido sobrepasarlo, lo que permitirá resoluciones mucho mayores de las actuales y podría obligar a reescribir los libros de Óptica. La investigación supone la culminación de una trepidante carrera entre cuatro grupos de científicos de todo el mundo.