Este estudio, coliderado desde el Instituto de Biología Evolutiva y publicado en un especial de la revista Science, muestra características fundamentales de la evolución y las dolencias humanas, así como para la conservación de la biodiversidad.
Drones, aviones, globos de investigación, equipos militares y fenómenos meteorológicos están detrás de la mayoría de los 'fenómenos aéreos no identificados', aunque algunos siguen sin tener una explicación. Se necesita información válida para la ciencia. Así lo asegura un grupo de expertos que, de momento, no ha encontrado ninguna conexión entre estos avistamientos y la vida extraterrestre.
La Universidad de Oviedo ha liderado el estudio más detallado hasta la fecha de las comunidades microbianas de la llamada zona de exclusión. El trabajo registra los mismos valores de riqueza microorgánica en los humedales muestreados dentro y fuera de esta zona, que abarca 30 km alrededor del lugar del accidente nuclear.