Un nuevo estudio revela que el hombre más rápido del mundo podría correr de forma asimétrica. Usain Bolt golpea el suelo con una fuerza máxima de 454 kg con la pierna derecha, pero no con la izquierda.
Esta forma de esprintar desafía las suposiciones científicas de que la simetría mejora el rendimiento y plantea nuevas hipótesis sobre los mecanismos físicos que permiten alcanzar velocidades máximas.