Este sábado, aeronaves australianas han informado de un vertido de petróleo junto a las aguas del Gran Arrecife de Coral. El responsable de la filtración es un buque de carga chino, el Shen Neng, de 230 metros de largo, que se dirigía de Queensland a China con un importante envío de carbón cuando se cree que quedó encallado en un banco de arena. Dispone de 950 toneladas de petróleo a bordo y aunque las pérdidas no son graves, sí se han visto las primeras manchas de crudo a su paso. Los aviones australianos que sobrevuelan la zona tienen previsto rociar productos químicos sobre el área afectada para dispersar el petróleo, y poder analizar después el grado de contaminación. La Gran Barrera de Coral es una de las mayores atracciones turísticas de Australia y se considera que es altamente vulnerable a los daños derivados de la contaminación. El barco se encuentra ahora a unos 70 kilómetros al este de la Gran Isla Keppel, frente a la ciudad de Rockhampton.