Investigadores de la Universidad Jaume I han desarrollado materiales basados en grafeno que pueden catalizar reacciones para la conversión y almacenamiento de energía. La tecnología patentada por la UJI combina el grafeno y los compuestos organometálicos en un único material sin alterar las propiedades más interesantes del grafeno, tal como la conductividad eléctrica. La tecnología, desarrollada por el Grupo de Química Organometálica y Catálisis Homogénea (QOMCAT) de la UJI, es de gran interés para la industria energética y se enmarca en la denominada 'economía del hidrógeno'. Un modelo energético alternativo en el cual la energía se almacena como hidrógeno. En este sentido, los materiales patentados por la UJI permiten catalizar reacciones para la obtención del hidrógeno a partir de alcoholes y podrían servir, además, como sistemas de almacenamiento de este gas.