En San Sebastián se está llevando a cabo una prueba piloto que implica el uso de expedientes digitales, una medida que podría ser la solución a la parálisis y la lentitud que desde hace tiempo sufre el sistema judicial. Podría acabar además con las montañas de demandas y el colapso de los juzgados. El interesado realiza todo el proceso burocrático a través de la red y todas las partes reciben aviso vía telemática. Una nueva forma de concebir la administración que ayudará también en el ahorro en el consumo de papel.