Investigadores de varias universidades de California (EE UU) han seguido en sus inmersiones a tres especies de ballenas barbadas y han medido la cantidad de plástico que hay en sus presas y en el agua. Los resultados de su estudio son sorprendentes: las ballenas azules consumen diariamente hasta 10 millones de partículas microplásticas, los rorcuales comunes entre 3 y 10 millones, y las ballenas jorobadas hasta 4 millones cuando se alimentan de kril. Se desconocen sus posibles efectos en la salud de estos animales.