Seis tortugas marinas han sido puestas en libertad en la playa de Llevant de Premià de Mar, en Barcelona. Los animales ingresaron hace meses en el Centro de Recuperación de Animales Marinos (CRAM) donde se les curó entre otras molestias de "roturas de los caparazones, agujeros en el aparato digestivo por haberse tragado anzuelos y gangrena en las extremidades", según explicó el director y veterinario de la Fundación Cram, Ferran Alegre.
Cientos de niños, que no quisieron perderse el acontecimiento, acudieron a la costa para despedir a las tortugas y ver cómo volvían a su hábitat natural.