El buque oceanográfico BIO Hespérides se encientra en la Antártida con una treintena de investigadores del proyecto Pegaso, un novedoso proyecto liderado por el Instituto de Ciencias del Mar del CSIC y financiado por el Ministerio de Economía y Competitividad y el Programa Marie Curie de la Unión Europea.
El proyecto tiene por objetivo estudiar cómo las emisiones de gases y partículas por el plancton marino regulan la formación y características de las nubes sobre el océano. Estudiar las nubes es importante porque reflejan la energía que nos llega del sol en forma de luz y constituyen el principal mecanismo refrigerante del planeta. Manuel Dall’Osto, científico responsable de las mediciones atmosféricas a bordo del BIO Hespérides, explica: “Sin nubes tendríamos una Tierra mucho más cálida; sin embargo, no entendemos suficientemente bien cómo se forman y se destruyen, y eso nos está limitando mucho en las proyecciones de clima y de cambio climático. El secreto está en entender el nacimiento de las partículas para comprender cómo nacen las nubes”.