Aunque la hipótesis menos probable es la presencia de megaestructuras alienígenas, las caídas irregulares y de hasta el 20% en el brillo de la estrella KIC 8462852 no dejan de intrigar a los astrónomos. La mejor explicación es que sean cometas los que ocultan a su paso la luminosidad de la estrella. “Nunca mencionamos a los extraterrestres, ni tampoco se nos pasó esa idea por la cabeza”, confiesa a Sinc una de las autoras de la investigación.