Investigadores del Instituto de Ciencias Fotónicas (ICFO) y otros centros internacionales han detectado los primeros signos de los plasmones del grafeno en la longitud de onda utilizada para las telecomunicaciones, un avance que podría tener aplicaciones en este ámbito. El experimento se ha realizado colocando emisores de un elemento, el erbio, a unos nanómetros de una lámina de grafeno.
Ahora, científicos del ICFO y otro centros de investigación (MIT, CNRS, CNISM y Graphenea) han demostrado de forma activa e in situ el control eléctrico del flujo de energía de iones de erbio a fotones o plasmones. El plasmón es la cuasipartícula que resulta de la cuantización de las oscilaciones del plasma, al igual que los fotones son cuantizaciones de ondas electromagnéticas y mecánicas.
El experimento se llevó a cabo colocando los emisores de erbio a unas pocas decenas de nanómetros de distancia de la hoja de grafeno, cuya densidad de portadores (es decir, su energía de Fermi) es controlada eléctricamente. Los resultados se han publicado en la revista Nature Physics.