En noviembre de 2009 salieron a la luz algunos correos electrónicos de científicos británicos cuyo contenido revelaba imprecisiones y, según los escépticos, maximizaba los efectos del cambio climático. Desde entonces se han puesto en duda la fecha del deshielo de los glaciares del Himalaya y las temperaturas ascendentes de China, entre otras cosas. Este hervidero de descrédito que está perturbando a la comunidad científica se llama Climategate. ¿Lograrán las críticas y el desprestigio afectar a la credibilidad de la ciencia climática?