La explicación de la mala vista del topo

La explicación de la mala vista del topo
En la imagen, arriba, se ven las características morfológicas del ojo del T. occidentalis. Los ojos del topo se esconden tras el pelaje (A) y están siempre cerrados por la ausencia de párpados (B). La córnea es transparente y el iris tiene numerosos bultos (C).Los tintes con hematoxilina y eosina de diversas secciones muestran que el ojo tiene las estructuras básicas y aspecto funcional (D), pero no está del todo desarrollado por la presencia de núcleos en las fibras desorganizadas del cristalino (E). El cristalino del topo muestra cierta transparencia y no tiene cataratas agudas (F). Se muestra, como modelo de un fenotipo de ojo de mamífero, el ojo (G) y el cristalino (H) de un ratón salvaje (fuente: BMC Biology).

Un estudio realizado por investigadores británicos y españoles da cuenta de las modificaciones que han sufrido los ojos de los topos por vivir bajo tierra. La investigación, que publica sus resultados en BMC Biology, ha consistido en realizar el primer estudio molecular del proceso del desarrollo del cristalino en un animal subterráneo. Se trata del topo ibérico (Talpa occidentalis) que, a diferencia de otros topos europeos, tiene los ojos permanentemente cerrados. Los investigadores, de las universidades de Aberdeen y Granada, explican que los defectos internos del ojo del animal no son el resultado de una enfermedad degenerativa, sino que se producen porque el desarrollo de las fibras del cristalino, que comienza de forma normal, no se completa.

Fuente: SINC / Zenera
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