La pesca de arrastre, la construcción de puertos y marinas, y los vertidos son las principales causas de la pérdida de praderas marinas en España. Según el último informe de la organización de conservación marina Oceana, en colaboración con la Fundación Banco Santander, España cuenta con más de 100.000 hectáreas de estos hábitats, pero pierde cada año entre un 3% y un 5% de su superficie.