Un estudio norteamericano, presentado en la Conferencia Anual de la Asociación Americana del Corazón, ha contabilizado las horas que pasan los adolescentes frente a una pantalla (ya sea de televisión u ordenador) y han relacionado estos resultados con factores como el género, la clase social, y el nivel educativo. Los resultados arrojan un nivel de exposición a las pantallas bastante alto: un 60% de los adolescentes pasa una media de 20 horas frente a las pantallas, mientras que un 30% lo hace durante unas 40, y alrededor de un 7% supera las 50.
Los investigadores estudiaron también los factores sociales que influyen en estos patrones de comportamiento, y concluyeron que los varones, y los adolescentes que pertenecen a familias con un nivel educativo más bajo, y que habitan en barrios de un nivel socioeconómico más desfavorecido, tienen más probabilidades de pasar más tiempo delante de una pantalla. Además, los científicos advirtieron de que este tipo de hábitos conllevan un riesgo elevado de padecer obesidad.