Esta semana está previsto que el satélite GOCE, el explorador del campo gravitatorio y la circulación oceánica de la Tierra, se autodestruya al entrar en la atmósfera terrestre. Los técnicos seguirán de cerca los fragmentos. La nave ha cumplido su misión, al igual que han hecho en los últimos días el carguero Albert Einstein de abastecimiento de la estación espacial internacional, y el satélite Planck, dedicado al estudio del fondo cósmico de microondas. Todas son misiones de la Agencia Espacial Europea (ESA).