Un trágico incendio ha destruido casi por completo las Tumbas de los reyes de Buganda en Kasubi (Uganda) edificadas en 1882 e incluidas como Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO en 2001. La importancia de las construcciones radica en su valor inmaterial, ya que están íntimamente vinculadas a las creencias y la espiritualidad de la población, así como a las nociones de continuidad e identidad.