Hasta el domingo 5 de marzo está abierta la segunda convocatoria de voluntarios para la elaboración del 'Atlas de Mamíferos de Cataluña'. Se necesitan rastreadores en Camp de Tarragona, Terres de l'Ebre, Cataluña central, Lleida, el Alt Pirineu, Arán, Empordà o el Prepirineo central. En 2022 ya se desarrolló la primera parte de este proyecto de ciencia ciudadana.
El Observatorio del Patrimonio Natural y la Biodiversidad quiere dar un nuevo impulso a la elaboración del primer Atlas de los mamíferos de Cataluña. En esta ocasión, el Museo de Ciencias Naturales de Granollers y el CREAF, con el apoyo del Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural de la Generalitat de Cataluña, convocan a la ciudadanía para conseguir que, al menos, 150 personas voluntarias formen parte de la comunidad que realizará el seguimiento de los mamíferos de Cataluña, en este segundo año de toma de datos.
Estos voluntarios contribuirán a tener una imagen cada vez más completa de la presencia de los mamíferos salvajes en la región. Las zonas a cubrir se encuentran mayoritariamente en el Camp de Tarragona, las Terres de l'Ebre, Cataluña central, Lleida, el Alt Pirineu, Arán, Empordà o el Prepirineo central.
Durante 2022, un primer grupo de voluntarios conformó una comunidad que pilotó la primera fase del Atlas. Hoy esa comunidad quiere crecer.
El trabajo realizado durante el primer año permitió probar y afinar las metodologías que se utilizan para encontrar o detectar la presencia de mamíferos en cada zona muestreada. La exploración se centra en colocar cámaras de fototrampeo, recorrer transectos y apuntar los rastros y los animales que se ven, recoger pelos y heces, así como grabar los ultrasonidos que emiten los murciélagos.
Los datos recogidos se comunican luego a los coordinadores del proyecto, que los analizan para elaborar conclusiones. Con esta convocatoria, se pretende encontrar a personas que cubran las zonas que todavía faltan por muestrear, a fin de conocer la distribución de los mamíferos en esta comunidad autónoma.
Los primeros datos (que reúnen la información de aproximadamente un 20 % del territorio catalán) han permitido empezar a trazar el mapa de lo que veremos en el futuro Atlas de mamíferos. Hasta ahora, se puede decir que, entre los mamíferos de tamaño grande y mediano, el jabalí y el zorro son las especies que más se han detectado, seguidos por la garduña, el tejón y el corzo. La cabra montés, la liebre y el coipú (una especie invasora) son las que menos han aparecido.
De los mamíferos más pequeños, como roedores y musarañas, los resultados son aún preliminares, porque el método para identificarlos pasa por el análisis de pelos en el laboratorio. Lo mismo ocurre con los murciélagos porque, aunque ya se han registrado los ultrasonidos que emiten, todavía hay que analizar la forma y la frecuencia de la mayoría de grabaciones para identificarlos.
En cuanto a especies en concreto, se puede mencionar la situación de algunas de ellas en las zonas donde se ha realizado el muestreo. Parte de esas pruebas concuerdan con los datos recogidos en otros programas de seguimiento, como son los casos de la nutria, el corzo o el ciervo.
Para las especies para las que no existen programas de seguimiento de gran alcance territorial, los datos recogidos en este primer año del Atlas permiten intuir también que algunas se encuentran bastante extendidas, como la gineta y el murciélago enano, el más pequeño de Cataluña.
El Atlas mantendrá abierta esta convocatoria hasta el 5 de marzo, a fin de comenzar con los muestreos a principios de primavera. Se ratrearán tres tipos de hábitats diferentes: forestal, abierto y de ribera.