Un equipo internacional de astrónomos ha encontrado un modo de obtener una imagen clara de los “esquivos” discos de materia que rodean a los agujeros negros supermasivos. Utilizando un filtro polarizado en el Telescopio de Infrarrojos del Reino Unido (UKIRT) del Consejo para las Instalaciones de Ciencia y Tecnología, situado en Hawai (EE UU), han podido ver a través de las nubes de polvo estelar que rodean esos agujeros negros. Este trabajo se ha publicado el 24 de julio de 2008 en la revista Nature.
De modo similar a cómo los pescadores utilizan gafas de sol polarizadas para evitar el deslumbramiento que causa la superficie del agua, y poder ver más claramente bajo ella, el filtro del telescopio ha permitido a los astrónomos ver más allá de las nubes de polvo y gas que rodean a los agujeros negros, hasta ver el disco de color azul en luz infrarroja.
Se cree que la mayoría de las galaxias –si no todas- tienen un agujero negro supermasivo en su centro, lo que constituye una de las áreas de investigación en astronomía. El estudio de esos agujeros negros, así como los descubrimientos acerca de estructura, pueden resultar difíciles debido a la enorme distancia a la que se encuentran de la Tierra. Además, las nubes de gas y polvo que rodean los agujeros negros hacen difícil obtener un espectro claro y sin contaminar de la zona próxima al agujero negro.
Andy Lawrence, del Instituto de Astronomía de la Universidad de Edimburgo (Reino Unido) y co-investigador del proyecto, ha dicho: “Desde hace décadas existe la teoría de que los agujeros negros supermasivos deben acumular materia en forma de disco, pero hasta ahora ha sido imposible demostrar esa teoría debido a la contaminación con nubes de polvo”.
El equipo, dirigido por Makoto Kishimoto, del Instituto Max Planck de Radioastronomía (Alemania), ha encontrado un modo de solventar este problema. Algunos de los agujeros negros presentan una cantidad muy reducida de luz difusa procedente de las proximidades del propio agujero negro, no de las nubes de polvo y gas que lo rodean, y esa luz se ha polarizado al incidir en la materia del disco. Utilizando un filtro que únicamente permite el paso de esa luz polarizada y bloquea la luz no polarizada procedente de las nubes de gas, han podido eliminar ésta visualmente y revelar el disco.
Este nuevo método puede ayudar a los astrónomos a comprender la región más externa de los discos, sobre las que se plantean todavía importantes preguntas: ¿cómo y donde termina el disco? ¿Cómo se produce el aporte de materia al disco?
El investigador Chris Davis del Centro Astronómico Conjunto (operado conjuntamente por científicos de Reino Unido, Canadá y Holanda) , el organismo que opera el UKIRT ha señalado que este telescopio está desde hace tiempo “a la vanguardia de la astronomía de infrarrojos, y durante casi dos décadas ha sido líder en el nicho de la polarimetría infrarroja”, y ha añadido: “Sin instalaciones como el polarímetro de infrarrojos (IRPOL) incluso con los telescopios más grandes del mundo sería imposible realizar interesantes descubrimientos como los realizados por Kishimoto y sus colegas".
Solo para medios:
Si eres periodista y quieres el contacto con los investigadores, regístrate en SINC como periodista.