Una campaña oceanográfica explora por primera vez con detalle áreas poco conocidas del Mediterráneo occidental con vehículos submarinos no tripulados de gran profundidad, y permite que se haga el seguimiento en tiempo real a través del portal Nautilus Live (http://www.nautiluslive.org/). Esta campaña, conocida como Nautilus NA016-Leg 1, se llevará a cabo entre el 29 de septiembre y el 8 de octubre a bordo de buque oceanográfico Nautilus, del Ocean Exploration Trust de la Universidad de Rhode Island, bajo la coordinación general del catedrático Miquel Canals, jefe del grupo de investigación de Geociencias Marinas de la UB, y Jamie Austin, de la Universidad de Texas, Estados Unidos.
La campaña se integra en un amplio programa oceanográfico que lideran los expertos Robert Ballard el famoso descubridor de los restos del transatlántico Titanic y Katherine Croff Bell, y tiene como objetivo estudiar detalladamente la geología y los ecosistemas marinos de la cuenca mediterránea con la ayuda de instrumentos de alta tecnología, entre ellos dos vehículos submarinos científicos operados por control remoto. Dichos vehículos (Argus y Hercules) tienen capacidad técnica para operar a 6.000 y 4.000 metros de profundidad, respectivamente, y están dotados de cámaras para grabar imágenes y de instrumentos científicos de medición y toma de muestras oceanográficas.
Explorar el Mediterráneo más profundo
La campaña Nautilus NA016-Leg 1, que zarpó del puerto de Alicante el 29 de septiembre, estudiará regiones submarinas de gran profundidad que no se han explorado nunca con este tipo de vehículos submarinos. «En una primera fase señala el catedrático Miquel Canals, se estudiará el área conocida como escarpadura del Mazarrón, entre las costas de Murcia y Baleares, con profundidades de más de 2.000 metros».
«Otra zona de trabajo —continúa Miquel Canals— será el mar de Alborán oriental, es decir, el área que comprende el cabo de Gata, el cañón submarino de Almería, las montañas submarinas cercanas y las grandes hondonadas del norte de la isla de Alborán. En concreto, se explorará con detalle la principal vía de salida de las aguas densas del Mediterráneo hacia el Atlántico, que es un estrecho situado entre la isla de Alborán y una alineación de montañas submarinas más al norte, con un rango de profundidad que va de los 300 a los 2.400 metros de profundidad». En esta zona, los vehículos submarinos también se sumergirán para estudiar la topografía del cañón submarino de Almería y de la falla de Carboneras, que es la más activa del entorno ibérico. Esta falla, que penetra tierra adentro, pertenece a un sistema muy dinámico de fracturas que se relacionan con los últimos sismos de Murcia.
La campaña oceanográfica cuenta con el apoyo de la Universidad de Barcelona, el Instituto Español de Oceanografía (IEO), el Instituto de Ciencias del Mar (ICM-CSIC), la Fundación Argo Maris y la Universidad de Girona.
El Mediterráneo: una violenta historia geológica
La zona de exploración de la Nautilus NA016-Leg 1 tiene un relieve muy accidentado, lleno de montañas submarinas, escarpes con grandes desniveles, de más de 2.000 metros. Tal como asegura Canals, «el relieve submarino es el resultado de una evolución geológica bien compleja, ligada a la propia existencia del Mediterráneo occidental tal como lo conocemos hoy en día. Además, esta región submarina enlaza con una gran zona de fractura: la de las Azores-Gibraltar, que forma un sistema geodinámico muy activo, de gran interés para los científicos y también para la sociedad porque son sistemas que pueden generar sismos, tsunamis, etc.». Canals destaca, asimismo, que «la región pertenece al sistema geodinámico que generó el principal tsunami vivido en Europa, el del famoso terremoto de Lisboa de 1755, de conocidos efectos catastróficos».
La campaña Nautilus NA016-Leg 1, que concluirá el próximo 8 de octubre en el puerto de Málaga, forma parte de una línea de trabajo investigador más ambiciosa del grupo de investigación Geociencias Marinas de la UB, que en verano lideró la campaña oceanográfica Promares - Oasis del Mar, para estudiar los grandes valles submarinos de Cataluña, la primera misión científica en la que se utilizó el vehículo submarino no tripulado de gran profundidad Liropus 2000, del IEO. El grupo también ha llevado a cabo, más recientemente, otra campaña en colaboración con el Departamento de Ecología UB, llevada a cabo en el área marina protegida de las islas Columbretes para cartografiar los hábitats marinos, en este caso con el fundamental apoyo de la Fundación Argo Maris.
Nautilus Live: hacer el seguimiento de la campaña oceanografía en tiempo real
La campaña Nautilus NA016-Leg 1 se puede seguir en tiempo real por el portal Nautilus Live (www.nautiluslive.org), que es una iniciativa de divulgación científica de la Universidad de Rhode Island y National Geographic para conectar al gran público con la actividad investigadora del día a día a bordo del buque oceanográfico Nautilus.
Patrocinan la campaña oceanográfica, entre otras organizaciones relevantes, National Geographic, el Ocean Exploration Trust y el Inner Space Centre (dirigido por el experto Dwight Coleman), de la Universidad de Rhode Island - Graduate School of Oceanography de Narragansett (Estados Unidos).