Hasta ahora el uso de herramientas por parte de los primates fuera del continente africano había sido poco observado. Pero en el Parque Nacional Serra da Capivara en Brasil una población de monos capuchinos usa desde hace 100 generaciones herramientas de piedra para alimentarse. Así lo ha confirmado un equipo de científicos al datar las piedras empleadas por estos animales durante los últimos 700 años. Se trata de la prueba arqueológica más antigua hallada fuera de África.
Los seres humanos no somos los únicos que utilizamos herramientas para realizar las tareas diarias. Un equipo de investigadores ha hallado nuevas evidencias arqueológicas que sugieren que los monos capuchinos brasileños (Sapajus libidinosus) han estado utilizando herramientas de piedra desde hace 700 años para abrir alimentos duros como anacardos, según señala un estudio publicado en la revista Current Biology.
Se trata de la muestra más antigua de una herramienta usada por monos fuera de África. “Hasta ahora, el único registro arqueológico premoderno proviene de un estudio sobre chimpancés en Costa de Marfil (África), donde las herramientas fueron fechadas con una edad de hace entre 4.300 y 1.300”, explica el autor principal Michael Haslam, investigador en la Escuela de Arqueología de la Universidad de Oxford (Reino Unido).
Junto a científicos de la Universidad de Sao Paulo (Brasil), el equipo se centró el estudio en la observación de un grupo de capuchinos en el Parque Nacional Serra da Capivara, en el noreste de Brasil. Los resultados muestran que los capuchinos salvajes, tanto mayores como jóvenes, utilizan piedras como martillos y yunques para abrir alimentos duros, entre los que se encuentran semillas o nueces de anacardo.
Según los investigadores, las piedras utilizadas como yunques son alrededor de cuatro veces más pesadas que las piedras usadas como martillo, y estas cuatro veces más pesadas que una piedra natural de media. Además, para los capuchinos los materiales también importan: utilizan cuarcitas duras y lisas como martillos, y areniscas planas como yunques.
Sin perder la tradición
Los capuchinos crean lo que los investigadores describen como 'puntos de procesamiento de anacardos' y, tras el trabajo, apilan las herramientas en lugares específicos como en la base o las ramas de los árboles de anacardos.
Gracias a excavaciones de hasta 70 cm de profundidad cerca de estos emplazamientos, los investigadores consiguieron determinar la edad, forma y composición de las herramientas utilizadas.
Las piedras encontradas en las excavaciones fueron fechadas mediante datación por carbono con una antigüedad de entre 700 a 600 años, lo que evidencia que las herramientas son anteriores a la llegada de los europeos al Nuevo Mundo.
Esta especie utiliza desde entonces estas herramientas como cascadores de alimentos duros. Los expertos determinaron gracias a técnicas de espectrometría de masas que los residuos de color oscuro dispuestos en la superficie de las herramientas correspondían a restos de anacardos.
video_iframe
Tras comparar las piedras utilizadas a lo largo de los años, los expertos concluyeron que eran prácticamente idénticas en cuanto a peso y composición. Alrededor de 100 generaciones de capuchinos han utilizado esta tradicional herramienta de piedra, lo que demuestra que esta especie de monos es 'conservadora' con respecto al uso de herramientas.
De monos a humanos
La investigación plantea preguntas acerca de los orígenes y la expansión del uso de herramientas en monos contemporáneos. Además, el comportamiento humano en sus orígenes podría haber estado influenciado al observar a los monos utilizando piedras como herramientas.
“Es una zona inexplorada que ofrece pistas acerca de la posible influencia de la utilización de las herramientas por los monos en el comportamiento humano”, afirma Haslam. “Es posible que los primeros seres humanos que llegaron a esta zona aprendieran acerca de este alimento desconocido, los anacardos, gracias a los monos que los comían”, añade el investigador.
No es el primer hallazgo de herramientas utilizadas por primates, aunque sí son las pruebas con más años encontradas fuera del continente africano.
Investigaciones anteriores dirigidas por Michael Haslam datan evidencias arqueológicas de entre 50 y 10 años de edad de herramientas utilizadas por macacos salvajes de la costa de Tailandia para romper caracoles marinos, cangrejos y frutos secos, y así poder extraer el alimento.
El mismo estudio señala que estos primates usan la misma herramienta hasta que se encuentran satisfechos de comida y la transportan durante todo el trayecto en busca de alimento. Los expertos observaron que, de media, los macacos abrieron nueve ostras con una misma herramienta, aunque uno de ellos llegó a romper 63 ostras, una tras otra, usando la misma piedra.
Referencia bibliográfica:
Haslam et al.: “Pre-Columbian monkey tools”. Current Biology. 11 de julio del 2016 http://dx.doi.org/10.1016/j.cub.2016.05.046.