El director general del Organismo Internacional de Energía Atómica, Rafael Mariano Grossi, ha lamentado que la seguridad de la mayor central nuclear de Europa se haya visto comprometida por el impacto de un proyectil ruso. No se han producido, “por suerte”, escapes radiactivos, pero este ataque “ya entra en otro nivel y la situación es muy preocupante, no solo para Ucrania”, ha advertido.
No se han producido daños en ninguno de los reactores de la central nuclear ucraniana de Zaporiyia tras el impacto de un proyectil en un edificio cercano al emplazamiento la pasada noche, que provocó un incendio localizado que fue extinguido posteriormente. Así lo ha asegurado este viernes, en una rueda de prensa transmitida desde Viena, el director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), el argentino Rafael Mariano Grossi.
Grossi ha señalado que las fuerzas rusas habían tomado el control de la central, pero que la instalación nuclear seguía siendo operada por su personal habitual. “Los sistemas de seguridad de los seis reactores de la central no se han visto afectados y no ha habido liberación de material radiactivo”, ha declarado.
El responsable de este organismo dependiente de la ONU destacó que, por el momento, se “mantiene cierta tranquilidad porque no se han producido fugas radiactivas, pero también hay mucha preocupación porque la integridad física de la central nuclear se ha visto comprometida. La situación es muy frágil e inestable”, ha señalado el diplomático argentino, quien alertó de los riesgos si los combates prosiguen cerca de centrales atómicas.
Disparar proyectiles en la zona de una central nuclear viola el principio fundamental de que la integridad física de las instalaciones nucleares debe mantenerse y ser segura en todo momento
Por el momento, los sistemas de control de la radiación en el emplazamiento son totalmente funcionales. Sin embargo, Grossi ha informado de que la situación sigue siendo muy complicada y, por lo tanto, aún no ha sido posible acceder a todo el emplazamiento para evaluar que todos los sistemas de seguridad son plenamente funcionales.
De las unidades del reactor de la central, la unidad 1 está parada por mantenimiento, las 2 y 3 han sufrido una parada controlada, la 4 está funcionando al 60 % de la potencia y las unidades 5 y 6 se mantienen “en reserva” en modo de baja potencia. El director ha informado además de que dos personas han resultado heridas en el ataque ruso.
El Centro de Incidentes y Emergencias de la OIEA se ha puesto en modo de emergencia total, debido al ataque a la central ucraniana. Y estará atendido las 24 horas del día para recibir, evaluar y difundir continuamente información sobre los acontecimientos, según Grossi.
“Estoy muy preocupado por la situación en la central nuclear de Zaporiyia y por lo que ha ocurrido allí durante la noche. Disparar proyectiles en la zona de una central nuclear viola el principio fundamental de que la integridad física de las instalaciones nucleares debe mantenerse y ser segura en todo momento”, ha advertido.
El director general de la OIEA, Rafael Grossi, durante la rueda de prensa sobre la situación en la central nuclear de Zaporizhzhia (Ucrania) en la sede del OIEA en Viena. / EFE/EPA/CHRISTIAN BRUNA
Grossi ha declarado en respuesta a preguntas de los periodistas que el proyectil que impactó en la central nuclear procedía de las fuerzas rusas. Esta afirmación contradice la información que está emitiendo el Ministerio de Defensa de Rusia, que ha afirmado que el proyectil lanzado procedía de “saboteadores” ucranianos, algo que el Gobierno del presidente Zelenski se ha apresurado a desmentir y a calificar de “información falsa”.
El director general de la OIEA ha señalado que está en constante contacto con las autoridades nucleares ucranianas para seguir los acontecimientos. Incluso se ha mostrado dispuesto a viajar a la antigua planta nuclear de Chernóbil para ver lo que sucede sobre el terreno y para mediar entre la Federación Rusa y el Gobierno ucraniano desde “este lugar tan simbólico”, si fuera preciso.
“Estoy listo para ir", ha dicho Grossi, después de que las autoridades ucranianas le pidieran asistencia, y ha asegurado que era el momento de tomar acciones para evitar cualquier peligro adicional. En este organismo “no estamos solo para tuitear desde Viena, sino para actuar en momentos como este”, ha subrayado.